
A las lesbianas y solteras danesas les ha durado la alegría dos meses. Los mismos que ha tardado el Partido Popular Danés (un grupo ultranacionalista que odia a los musulmanes y que es la tercera fuerza del Parlamento) en presentar una propuesta para que el Estado deje de pagarles la inseminación artificial, como estableció una ley que entonces salió adelante gracias al apoyo de algunos diputados del partido del Gobierno.
Ahora, el Partido Liberal del primer ministro Rasmussen ha salido corriendo a apoyar la propuesta y a asegurar que esta vez no habrá disidencias.
La inseminación artificial serguirá siendo legal, claro, pero si eres mujer sin pareja masculina estable o lesbiana, te la tendrás que pagar. Y, en Dinamarca, no es precisamente barata. Según el ministro de Sanidad, es una cuestión de prioridades: que una pareja heterosexual no pueda tener hijos "con medios naturales" se puede considerar un problema sanitario; en el otro caso, no...